Biografía
Miguel Mitlag (1969, Buenos Aires, Argentina).
Estudió dirección de cine en la Universidad del Cine de Buenos Aires. Asistió a talleres de fotografía con Juan Carlos Villareal (1990), Alberto Goldenstein (2000) y a una clínica de obra con Jorge Gumier Maier (2001). Durante 1991 y 1992, realizó talleres en el International Center of Photography de New York. En 2000, obtuvo el “Subsidio a la creación artística” de la Fundación Antorchas y en 2003 recibió una beca para asistir a Programa de Talleres para las Artes Visuales C.C.R.Rojas - UBA | Kuitca.
Entre sus exposiciones individuales se destacan las realizadas en la galería Braga Menéndez (2006) y en la Fotogalería del Centro Cultural Ricardo Rojas (2002). Participó en diversas exposiciones colectivas, tales como Civilización y Barbarie (argentinos contemporáneos), Brasil, Guatemala, Panamá, Chile, Argentina (2004-2006); Folk, Daniel Abate Galería (2005); Barilaro-Mitlag, Espacio Vox, Bahía Blanca (2001); Fotografía Argentina, junto a Ar Detroy en el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires (1999).
Las obra "Plataforma striper" fue seleccionada para el Premio ArteBA-Petrobras y en 2004 la instalación Patio Interior formó parte del Proyecto Red en ArteBA. Asimismo, recibió el Primer Premio Bienal Nacional de Arte de Bahía Blanca (2005) y con Art Detroy el Premio Leonardo de Video (1996), entre otros.
Visión del arte
1. Elija una obra que lo/la represente, descríbala haciendo referencia a su formato y materialidad, su relación con el tiempo y el espacio, su estilo y su temática; detalle su proceso de producción
“Monumento Marrón” es una fotografía color. Es un trabajo que hice en 2003, en un momento que pensaba en cómo desarrollar una idea mental en una dimensión espacial. Primero, pensada como un monumento real, un monumento cínico, vaciado de contenido, muy ácido. Incluí elementos que me interesaban particularmente o que me resultaban sugestivos como, por ejemplo, una guitarra, una flauta y unas galletitas. Me interesaba también que fuese un espacio contenedor de una situación, en este caso, unos almohadones que para mí son el tiempo suspendido, la inactividad. Fue también la primera vez que construí algo en su totalidad, obstruyendo toda la superficie anterior. Uno de los objetivos era demostrar que en esa aparente naturalidad todo está construido, y viceversa, que en tal artificialidad hay vicios y modelos que parecen casuales; resaltando algunos puntos especiales.
Como decía antes, tape todo, no hay nada en esa fotografía que no estuviera antes. Es completamente falsificada. Ahí me puse a pensar en la falsificación de los espacios.
Unos alemanes me objetaron que un monumento suele tener el pináculo en el centro; a mí me interesó darlo vuelta.
2. En líneas generales, ¿cuál sería la forma en que sugeriría leer su obra?
En primer lugar, me parece que una obra, un cuerpo de obra, necesita ser leído con mucha atención, buscar los puntos de conexión con otras anteriores, con otros artistas, con cosas que están por fuera del mundo del arte, con maneras de pensar filosóficas, con la ciencia, con las ciudades y los mitos urbanos. Sin todo ese bagaje, que es necesario para comprender las complejidades del mundo contemporáneo, el arte se vuelve un poco fastfood. Igualmente, siempre ha sido así, nadie viene de la selva, mira un cuadro y dice esto es genial, siempre hay un background cultural.
Segundo, me parece que en mi obra hay algo del tono, que es muy sutil, y que uno lo puede agarrar, o se puede escapar muy fácilmente. Es un límite muy fino. Nuevamente, pienso que en todo arte lo hay, tal vez en diferentes grados.
3. En relación a su obra y su posición en el campo artístico nacional e internacional, ¿en qué tradición se reconoce? ¿Cuáles serían sus referentes contemporáneos? ¿Qué artistas le interesan de las generaciones anteriores y posteriores?
La tradición es un concepto bastante problemático que no me atrae en lo más mínimo.
Generalmente, la gente que me interesa vive y produce partiendo de la actualidad, de lo que ve en la calle, de lo que son las noticias, y de lo que tiene en su cabeza el día de hoy.
Hay mucha gente que esá haciendo obra muy buena en la Argentina, arriesgando, cada uno como puede, con enormes dificultades económicas, porque el mercado en la Argentina es un chiste.
Generalmente, los artistas que me interesan son personas que conozco y, por lo tanto, puedo comprender más enteramente su Proyecto y hasta los admiro. Tanto a mí como a esta gente le gusta el rock, la música electrónica, las fiestas, los libros. Nombro algunos: Valentina Liernur, Debora Pruden, Rui Krygier, Gary Pimiento, Leo Estol, Carla Bertone, Mariano Grassi, Fabian Burgos, Roberto Jacoby, Gumier Maier, Magdalena Jitrik, Eduardo Navarro, Nicanor Araoz, Galindo. Raving Mad Carlos, Fred, Rosana Schoijett, Luciana Lamothe.
4. Pensando en los últimos diez o quince años elija obras o muestras a su criterio fuertemente significativas de otros artistas de Argentina y explique por qué.
Algunos trabajos de Fabián Burgos me parecen muy importantes para pensar la relación de lo estético con lo físico y lo mental. Es un trabajo que tiene mucha profundidad y entrega.
Victor Grippo pudo juntar todo eso y lo relacionó a un costado social de la Argentina.
M. Pombo: su última muestra en Benzacar fue muy poderosa, con humor, sensibilidad, muy compacta, excelentemente bien resuelta, un mundo cerrado casi didáctico de sus elementos (personajes - situaciones - abstracciones psicodélicas).
La precisión en la búsqueda fotográfica de Alberto Goldenstein.
Los recitales de RMC, a los que no va nadie y entonces se disipan en el éter.
Heavy Mental de Gastón Pérsico: un pastiche de conceptos, pensamientos, música, procesos creativos, espacio institucional y una tribu urbana en arteBA.